por aunmaslejos | Sep 29, 2014 | Sin categoría |
Ciudades y pueblos escoceses Septiembre de 2012 Pese al omnipresente cielo gris escocés teníamos que darnos una vuelta por Glasgow, una de las ciudades del país más importantes, aunque cede la capitalidad a Edimburgo. Mereció la pena pasear por muchas de sus calles peatonales y repletas de comercios, en el recuerdo me queda adquirir un dvd de los humoristas Monty Phyton antes de dedicarse al cine, ¡icono británico donde los haya! Nos hubiera gustado estar más tiempo, pero era una ciudad de paso dentro de nuestra planificación. En Stirling, una pequeña ciudad escocesa con un gran pasado estuvimos casi un día, en el que, entre otras cosas, visitamos el famoso monumento dedicado al héroe nacional William Wallace, que hace unos años se haría todavía más conocido por Braveheart, la película protagonizada y dirigida por Mel Gibson. Comimos en un lujoso y barroco restaurante del centro y nos arriesgamos a pedir un pescado, como tantas otras veces nos ocurriría en el viaje, la gastronomía británica no es uno de los fuertes del país. Wick, pequeña ciudad costera al norte de Escocia fue una parada previa antes de afrontar las Islas Orcadas, a las que iríamos en ferry al día siguiente. Dormimos en un solitario hotel a las afueras, del modo en el que nos miraron no estaban muy acostumbrados a ver extranjeros. Dimos un breve paseo por sus calles, estremecedoramente vacías de gente, era fin de semana y no había un alma en las calles. Por último, justo antes de entrar en la Isla de Skye, visitamos Oban, un precioso pueblo pesquero donde degustamos unos deliciosos arenques frescos, unas buenas...