Olympia

Olympia

Olympia, los juegos olímpicos 28 de agosto de 2005 El santuario de Olimpia se encuentra a pocos kilómetros del mar, ubicado entre olivos y cipreses, en una valle de la región de Élide. La entrada, que cuesta 9€, es bastante completa, e incluye tanto el santuario en sí, como los dos museos, el arqueológico y uno situado a la entrada del complejo dedicado a la historia de los distintos juegos. Si le dedicas tiempo y te lo tomas con calma puedes emplear tres o cuatro horas en visitar todo. Nosotros cometimos de nuevo el error de visitarlo a las horas intempestivas en las que más aprieta el calor y, aunque nos pusimos nuestros gorritos e íbamos bien provistos de agua, no evitamos que el sol nos acabara achicharrando. Muy cerca de la entrada principal, tras pasar el gimnasio donde se preparaban los atletas durante un mes, antes de comenzar los juegos, te encuentras con «El altar de Hera», donde, aún en la actualidad, se enciende el fuego olímpico que, desde aquí, parte en su viaje hacia la sede elegida. Impresiona el estadio, al cual se accede a través de un pasillo abovedado en su comienzo. Teníamos que corrérnoslo, era el mejor homenaje que se podía hacer, así que, primero Jorge, despojándose de su camiseta y mostrando su regio torso, corrió la distancia honrosamente. Luego yo, despojándome también y mostrando, mi no tan regio torso, recorrí la distancia. Ambos tuvimos que soportar una pequeña bronca de una de las vigilantes del santuario, que nos increpó por habernos quitado la camiseta, nosotros entendimos que nos había abroncado por faltar el respeto,...