No voy a extenderme mucho en repetir lo que ya tanto se ha escrito sobre esta ciudad.

En la galería hay un buen número de fotografías que muestran las bellezas y atracciones incontestables de esta ciudad, la más turística del mundo, por algo será.

Sí que puedo decir que sin embargo, París peca de demasiado «orden» y poca actividad social, o al menos esa es mi impresión, comparándola con la energía que desbordan otras ciudades europeas como Londres, Berlín o Amsterdam.

Da la impresión, posiblemente errónea, que cuando cae la noche, París se aletarga y se duerme.

Solo Montmartre parece que se excluye de este sopor, conservando todo el ambiente bohemio por el que este barrio se hizo conocido en el mundo.

 

Recuerdo que en una de mis visitas me aventuré, o mejor dicho, me perdí, por uno de los barrios alejados del centro, repleto de inmigrantes, otra ciudad, alejada de la pompa del turismo, pero auténtica y real.

En la galería os vais a encontrar con los grandes y archiconocidos lugares de esta gran ciudad que recoge tanto patrimonio de todo tipo y que va descubriéndose a medida que más se visita.

 

Sin duda la próxima vez que vaya me centraré en buscar esa vida que critico por su aparente ausencia pero que estoy seguro debe de estar ahí, escondida.