Olympia

Olympia

Olympia, los juegos olímpicos 28 de agosto de 2005 El santuario de Olimpia se encuentra a pocos kilómetros del mar, ubicado entre olivos y cipreses, en una valle de la región de Élide. La entrada, que cuesta 9€, es bastante completa, e incluye tanto el santuario en sí, como los dos museos, el arqueológico y uno situado a la entrada del complejo dedicado a la historia de los distintos juegos. Si le dedicas tiempo y te lo tomas con calma puedes emplear tres o cuatro horas en visitar todo. Nosotros cometimos de nuevo el error de visitarlo a las horas intempestivas en las que más aprieta el calor y, aunque nos pusimos nuestros gorritos e íbamos bien provistos de agua, no evitamos que el sol nos acabara achicharrando. Muy cerca de la entrada principal, tras pasar el gimnasio donde se preparaban los atletas durante un mes, antes de comenzar los juegos, te encuentras con «El altar de Hera», donde, aún en la actualidad, se enciende el fuego olímpico que, desde aquí, parte en su viaje hacia la sede elegida. Impresiona el estadio, al cual se accede a través de un pasillo abovedado en su comienzo. Teníamos que corrérnoslo, era el mejor homenaje que se podía hacer, así que, primero Jorge, despojándose de su camiseta y mostrando su regio torso, corrió la distancia honrosamente. Luego yo, despojándome también y mostrando, mi no tan regio torso, recorrí la distancia. Ambos tuvimos que soportar una pequeña bronca de una de las vigilantes del santuario, que nos increpó por habernos quitado la camiseta, nosotros entendimos que nos había abroncado por faltar el respeto,...
El Peloponeso

El Peloponeso

Peloponeso, cuna de civilizaciones 24 de agosto de 2005 Tras visitar la asombrosa isla de Santorini pusimos rumbo al Peloponeso, sabíamos que no nos daría tiempo a verlo todo así que decidimos improvisar. El miércoles por la mañana cruzamos el canal de Corinto sin apenas darnos cuenta y nos dirigimos a Micenas. La antigua ciudadela se encuentra a unos veinte kilómetros de la costa, cerca de la ciudad de Argos. Y se asienta bajo los montes Agios Ilias de 750 m y Zara de 600 m, el paisaje actual resulta bastante seco, con apenas árboles y algunos olivares, pero en otros tiempos debió ser una región fértil y rica. Tras pagar la entrada de ocho euros recorrimos los restos arqueológicos, de los cuales la Puerta de los Leones es lo que se encuentra en mejor estado. Al atravesarla dejas a la derecha un cementerio real en forma de círculo, y subiendo se van dejando restos de habitáculos a ambos lados, en la parte más alta estaba el palacio, del que tampoco queda gran cosa. Hay una cisterna que se puede visitar con linterna, gracias a la cual se abastecían de agua desde el exterior de la ciudadela. Mejor impresión nos dejó el museo, en el que se pueden ver maquetas de cómo fue la ciudadela, y donde hay expuestas innumerables piezas de todas las etapas. Se describe toda su historia, desde el Neolítico hasta nuestros días. Por último visitamos el Tesoro de Atreo, o Tumba de Agamenón. Se encuentra en muy buen estado. Se llega a ella regresando hacia el pueblo por la carretera a mano derecha. Un poco...
Meteora

Meteora

Meteora, monasterios suspendidos 8 de agosto de 2005 Recogimos a Gema y a Laura a las dos de la madrugada en el aeropuerto de Tesalónica, al norte de Grecia. Con la emoción no podíamos pensar en dormir y nos dirigimos al puerto de la ciudad para tomar algo y charlar un rato. Nos encontramos con cuatro o cinco barcos amarrados transformados en bares de copas, cada uno con su estilo particular. A la entrada de cada uno de ellos había un cartel con unos horarios muy raros. No entendíamos de qué iba el tema, así que preguntamos en uno de ellos: cada dos o tres horas los barcos se ponían en marcha y daban un paseo de media hora, cada barco tenía horarios distintos, con lo que en ningún momento se encontraban todos amarrados. Decidimos probar la experiencia en el más auténtico de todos, nos subimos unas cervezas a cubierta y al cabo de una hora el barco partió. Después del paseíto decidimos irnos a dormir, el amanecer empezaba a amenazarnos y al día siguiente nos esperaban los monasterios «suspendidos» de Meteora. Llegamos a la zona sobre las tres de la tarde. Se suponía que había autopista casi hasta Meteora, pero está aún en construcción, y al ser tan abrupta la zona tardábamos bastante en recorrer las carreteras. Fuimos directamente al monasterio Moni Megalou Meteorou o Gran Meteoro, el más grande y completo y desde el que se dice que hay las mejores vistas de la región. Se hizo el más rico y poderoso gracias al emperador de Serbia Simeón Uros, que legó toda su fortuna y se hizo...