La Bangkok monumental

La Bangkok monumental

La Bangkok monumental Julio – agosto de 2007 Los templos y edificios de interés histórico de Bangkok son relativamente modernos, nada que ver con las civilizaciones antiguas del Mediterráneo, el Golfo Pérsico o China, datan de principios del siglo XVIII en adelante. El primer lugar que atraerá al visitante es sin lugar a dudas el Wat Phra Kaew (o Templo del Buda Esmeralda) y el Gran Palacio, principal monumento de Ko Ratanakosin, el barrio que engloba la mayor parte de la historia de la ciudad. El templo fue consagrado en 1782, el primer año de la capitalidad de Bangkok, y reúne anualmente a miles de peregrinos, la principal atracción es el Buda Esmeralda, de apenas 75 centímetros y fabricada en jade verde y no en esmeralda como se creyó en un primer momento, la figura casi no se distingue dentro de su «traje» dorado (dependiendo de la época del año lleva un atuendo u otro, los dos que no usa en el momento de la visita se pueden ver en un museo adjunto). El complejo está dividido en dos, un área religiosa y otra residencial, la primera parte es sin duda la más interesante con chedis o estupas doradas, templos con tejados de colores y paredes decoradas con coloridos cristales, estatuas de guardianes y demonios y, lo más interesante, murales del Ramakien (equivalente al Ramayana hindú donde se cuenta el rapto de Sita, la mujer del dios Rama, por el demonio Rawana y su posterior liberación con ayuda de Hanuman). La parte residencial muestra claras influencias europeas y sólo mantiene el estilo tailandés en sus tejados y cúpulas. El...
Bangkok, energía desbordada

Bangkok, energía desbordada

Bangkok, energía desbordada Julio – agosto de 2007 Bangkok ha resultado ser otra de esas ciudades claves en el viaje, por ella hemos pasado ya cuatro veces y al menos pasaremos otra más antes de emprender el regreso. La ciudad representa el centro neurálgico del turismo en el Sudeste Asiático, capital de la mayor potencia del este de Asia en este sector (por ahora, China está a la zaga). Pero el turismo no es la única actividad de esta metrópoli, ni mucho menos, los centros de negocios inundan la ciudad moderna, junto a la famosa calle Sukhumvit, casi todos los países del mundo tienen representación en esta zona donde es tan común ver a occidentales como a tailandeses. Las arterias se colapsan en hora punta como en cualquier gran ciudad, por eso merece la pena conocer y disfrutar de los servicios del Chao Praya Express, el ferry de pasajeros que recorre el río Chao Praya realizando estratégicas paradas en las zonas más interesantes. El río es el alma de la ciudad, en sus orillas se levantan los monumentos más importantes: el Wat Phra Kaew y el Gran Palacio (parada número 9), el Wat Pho y el Wat Arun (parada número 8) o China Town (paradas 6 a 4), en muchas de estas paradas y en otros puntos de las orillas es posible disfrutar de una comida mientras se observa la vida del río, con su ir y venir de ferries y barcazas con mercancía. Pero el Chao Praya no es el único río navegable en la gran capital, hay otros canales llamados Klongs por los que circulan servicios de...
Siam

Siam

Los antiguos reinos de Siam 17 de julio de 2007 Nuestra primera parada con Laura y Yosko fue en las planicies del centro del país, aquí se encuentra el origen del reino de Siam y la actual Tailandia, los dos lugares de mayor interés histórico son las antiguas capitales de Ayutthaya y Sukhothai, ambas rodeadas de otros pequeños yacimientos en sus alrededores. Ayutthaya es la más moderna de las capitales y su reinado se remonta a los siglos XIV-XVI. Es la más cercana a Bangkok y fue la primera en nuestra ruta cultural, llegar fue bastante sencillo a pesar de que Bangkok parecía estirarse hasta el infinito con su tráfico, una vez en la autovía condujimos sin problema los 60 kilómetros. Llegamos temprano a la ciudad, sin embargo el hostal donde pretendían alojarse nuestros amigos estaba lleno, no es que la mujer lo tuviera muy claro, porque nos estuvo mareando la primera hora, finalmente decidimos desayunar algo allí y buscar otro lugar. Ya situados condujimos la camioneta cerca del yacimiento y nos dispusimos a visitarlo, pronto nos daríamos cuenta de la extensión del lugar. Quizás el wat o templo más conocido sea el Wat Phra Mahathat, cuyo elemento más famoso es una cabeza de un buda sostenido por un entramado de raíces, dice la leyenda que cuando los ladrones birmanos expoliaron Ayutthaya esa cabeza quedó enterrada para aparecer más tarde protegida por el árbol, cualquier persona que viaje a Tailandia verá sin duda postales y fotografías de este lugar. Caminando por el inmenso parque fuimos dejando a un lado pequeños templos hasta llegar a un estanque con los nenúfares...
Regateando entre canales

Regateando entre canales

Regateando en los canales de Damnoen Sadoak 10 de julio de 2007 Tailandia está repleta de ríos, de muchos de ellos surgen canales y subafluentes que cruzan muchos pueblos, formando auténticas vías de comunicación entre distintos puntos del país. Las regiones que rodean la capital, Bangkok, son las que más ríos y canales navegables poseen y en ellos se establecieron desde hace muchos siglos verdaderos mercados flotantes que ahora hacen las delicias de los visitantes. A cien kilómetros al oeste de Bangkok se encuentra el más famoso de los mercados, Damnoen Sadoak, donde a las 10 de la mañana se acumulan los turistas que provienen de la capital en viajes organizados. Sin embargo a primera hora de la mañana y a lo largo de la tarde el lugar es tranquilo y el visitante que se aventure a pernoctar en la zona disfrutará de un ambiente agradable y tranquilo. Cuando nos desviamos de la nacional siguiendo las indicaciones del mercado era ya la hora de comer, habíamos hecho un par de paradas previas en la zona para preguntar los precios de los tours en barca pero ninguno nos había convencido. Al entrar en la calle principal un hombre nos paró y nos ofreció sus servicios, 300 bahts por un paseo de unas tres horas comenzando a las 7 de la mañana, era por ahora la mejor oferta y, aún mejor, tenía un tranquilo aparcamiento sombreado con baño y duchas donde podríamos dormir. Por no precipitarnos continuamos un rato, pero no encontramos nada mejor, así que sin más regresamos y aparcamos bajo unos árboles. Aprovechando la tranquilidad del lugar salimos a...
Golfo de Tailandia

Golfo de Tailandia

Golfo de Tailandia, camino de Bangkok 7 de julio de 2007 Aún quedaba una semana antes de que llegara la nueva visita y Phuket no nos había enganchado lo suficiente como para quedarnos, además de que los temporales comenzaban a hacer su puesta en escena impidiéndonos dormir en las playas. Según habíamos leído la costa del Golfo de Tailandia no se ve afectada por el mismo monzón que la costa del Mar de Andamán, allí nos dirigimos con la vaga esperanza de que fuera cierto, ya que apenas 150 kilómetros de distancia separan una costa de otra y no nos creíamos mucho que de repente el sol aparecería sin más. Emprendimos la carretera que sigue la costa oeste hacia Myanmar con la intención de desviarnos por una nacional que cruza un parque nacional que nos habían recomendado visitar. Pudimos comprobar que al norte de Phuket la costa no está tan desarrollada y probablemente esconde algunas playas interesantes, pero el monzón nos quitó de la cabeza la idea de explorar esa zona, al igual que la de visitar el parque, la lluvia a veces se hacía tan intensa que nos obligaba a parar, queríamos salir de allí cuanto antes. No es que al llegar a la otra costa dejase de llover pero al menos las lluvias fueron más moderadas y tuvimos todos los días unas cuantas horas de descanso, así pudimos explorar esta región, mucho menos transitada por extranjeros pero mucho más rica en historia y cultura. La primera noche dormimos a unos kilómetros al sur de Chaiya, en una zona de manglares muy agradable, con un área para aparcar...
Ko Phuket

Ko Phuket

El turismo en masa de Ko Phuket 5 de julio de 2007 Un gran cartel sobre una flamante autopista nos daba la bienvenida a Ko Phuket, acabábamos de cruzar el puente que separa la tierra firme de esta isla, la más grande de Tailandia y quizás el mayor destino turístico del país, y uno de los más importantes del Sudeste Asiático. Para nuestra primera noche decidimos dormir en una reserva natural junto a la playa, repleta de pinos y zonas de picnic, teníamos muchos sitios donde aparcar, pero lo primero era comer. Había un chiringuito improvisado junto a la playa con unas carpas instaladas, unas sencillas mesas de madera y unos cojines, comimos un delicioso cerdo a la brasa junto al mar, que por el monzón estaba bravo y desaconsejable para el baño. Por la tarde daríamos un paseo por la playa y llegaríamos hasta la zona más turística, que estaba desierta, nos extrañó pero por lo que veríamos al día siguiente casi el cien por cien de los extranjeros se apiña en la horrorosa playa de Patong. Llegamos a Patong Beach poco después de comer y enseguida nos horrorizó lo que vimos, decenas de altos edificios de apartamentos y hoteles ocupaban la línea de una playa que sin duda en el pasado tendría que haber sido bonita, las tiendas de souvenirs y las sastrerías, los internets, los bares y restaurantes occidentales se prodigaban incontroladamente. En la playa casi era más horrible, cientos de tumbonas, mujeres dando masajes, gente haciendo parapente, motos de agua y reality shows de thai boxing, verdaderamente era el antisitio para disfrutar de la playa,...